Push up pop cakes

 Aquí estoy de nuevo con una cucaca de receta súper fácil de preparar y con unos resultados tan vistosos y apetecibles como estos. Son ideales para regalar, de hecho, la finalidad de los que hice fueron para un detalle por el cumpleaños de una buena amiga.

 Para quien no lo sepa, un push up pop cake es un pastelito de varias capas metido dentro de un envase de plástico trasparente y desmontable similar a los helados tipo "mikolápiz" para que nos entendamos jejeje. Este se compone de capas de bizcocho, crema y una decoración en la parte superior.
 Os cuento como prepararlos.

Para 4 unidades necesitaremos:

• 5 o 6 cupcakes preparados con la receta que mas os guste (chocolate, fresa, oreo...) Yo en este caso hice la de vainilla de toda la vida. Queda más cuco todavía si se añade colorante al bizcocho. En mi caso hice uno solo con bizcocho rojo y los otros tres con degradado de color, cada capa era de un color un poco mas clarito que el anterior.
• Buttercream de queso.
• Decoración comestible al gusto.

 
Para la buttercream de queso necesitaremos:

• 63 g de mantequilla a temperatura ambiente
• 150g de icig sugar ( en su defecto azucar glass)
• 63g de queso crema tipo Phildelphia frío y no light.

Batimos la mantequilla con el azúcar con una batidora de varillas hasta que la mezcla sea cremosa, añadimos el queso crema  y seguimos batiendo unos 4 minutos pero  cuanto más tiempo  mejor. Esta crema tiene que conservarse en la nevera. Además, el frío hace que se valla endureciendo, por lo que si queremos utilizarla de inmediato, es conveniente meterla unos 15 min en la nevera para que coja una mejor consistencia para usarla con la manga pastelera.

Para montar los Push up pops cakes:

Cortaremos en dos o tres capas cada cupcake y reservaremos.
Pondremos en el recipiente de plástico para los push up pops una lámina de bizcocho, seguidamente una capa de crema y luego otra de bizcocho...así hasta llegar casi hasta arriba del recipiente donde por último, decoraremos con la manga pastelera y pondremos la decoración comestible que más nos guste: purpurina comestible, fideos de colores, mini nubes...lo que prefiramos.

Yo creo que para ser los primeros que hago tampoco me salieron tan mal... aunque por supuesto son mejorables. Lo que está claro es que es un regalo súper original, diferente y que está buenísimo.
¡ Un besote!